Vislumbramos los horizontes
que al impedir caminar
nos atan
a las condiciones terrenales
a las imposiciones externas
a lo que nos viene por defecto
Esta sería, definitivamente, la última vez que haría el esfuerzo por intentar comprender algo de lo que me rodea.
La experiencia me ha señalado que, lejos de resultar eficaz, efectivo, notable, el último término alcanzado será siempre, siempre, el primero.
Volver al punto de partida.
Que tras largas elucubraciones haya podido hallar una solución no significa nada. Nada.
Nada, porque se vuelve al amargo comienzo. Lo deducido se olvida, lo arrastra la marea hasta sus profundos e inmensos terrenos.
El apartado de la mente que está dentro y fuera de ti.
Y que no me malinterpreten porque el volver a la casilla de salida no es el resultado de que, ni mucho menos, los extremos se toquen.
Los extremos no se tocan. El propio concepto de extremos tocándose no es factible.
Si quieren hablar de extremos que se tocan, por favor, hablen de ruedas. Pero no de extremos.
- Citación :
- una dos tres duchas
mucho más viejo
pero como nuevo
Tengo un reproche que hacerle al mundo.
Lo culpo por haber desatado sobre mí
toda la furia de este mal incurable,
de esta patología del espíritu:
El doble don de la sensibilidad suficiente
para apreciar las cosas buenas y sencillas,
y la absoluta incapacidad para disfrutar de ellas.
No es la mala vida la que me mata, no;
es la vida toda
y mi conciencia extrema de ella
-vislumbre de la muerte.
Primero maldigo. Luego
reclamo un poco de atención:
Dimito como ser humano.
Nacho Vegas